sábado, 30 de marzo de 2019

INDÍGENA ESQUIMAL

Casi terminaba el mes de Marzo de 2019, sin la correspondiente publicación de un dibujo o pintura.  Misión cumplida. En una nueva fase del aprendizaje personal del dibujo del rostro humano, surge como primer ensayo el presente dibujo.

INDÍGENA ESQUIMAL
TECNICA: Lápiz de grafito negro
21.8cm. X 28cm.
FECHA: Marzo, 03, 2019
AUTOR. Mtro. Ps. Alejandro Fabela Alquicira


sábado, 9 de marzo de 2019

KARATE-DO Y PSICOLOGÍA

KARATE-DO Y PSICOLOGÍA

el presente documento fue redactado hace ya 17 años. Época en la que concluía mi instrucción como practicante de esta arte marcial. en diciembre de 1999, alcance el grado de Primer Dan (cinta Negra). fue un esfuerzo de seis años de constante trabajo físico, del cual quede muy satisfecho. con parte de dicho derecho a un grado en el Karate, se me solicito hablar de la psicología y su relación con las artes marciales. el producto de ello fue este trabajo.

PSICOLOGÍA Y KARATE DO
PS. ALEJANDRO FABELA ALQUICIRA

Mente sana en cuerpo sano
Anónimo
Conócete a ti mismo
SOCRATES

INTRODUCCION

Han pasado seis años de practica constante del karate do. Ello representa la consolidación de viejos anhelos que quedaron pendientes desde hace veinticinco años, al observar y practicar por tres meses el karate do.
Las circunstancias de la vida permitieron el trazo de un camino, el cual siempre estuvo matizado por la practica constante de diversos deportes; a decir: fut bol, voley bol, basket bol beis bol, natación y clavados. Practica tenaz bajo la consigna de “Mente sana en cuerpo sano”.
En 1976, un nuevo derrotero conduce al estudio de la psicología, específicamente en el área clínica. Con ello se inicio un proceso de estudio, trabajo, investigación y reflexión sobre el psíquismo del ser humano.
Como es conocido, el campo de la mente humana es relativamente, solo en años recientes, se conforma como objeto de estudio a través de la investigación científica. Sin embargo, el interés por los fenómenos psíquicos tiene mayor antigüedad. Así, por ejemplo son objeto de la reflexión poética y filosófica de los antiguos griegos. Ahora bien, en la filosofía, ética y moral de culturas milenaria como la hindú, china y japonesa ya observamos el análisis de la conducta humana.
Ejemplo de la cultura occidental y oriental con respecto al psiquismo humano, lo encontramos, respectivamente en las frases tan celebre y conocida de Socrátes: “Conócete a ti mismo”; y la búsqueda del conocimiento del hombre con relación a su mundo en la filosofía budista.
Iniciada la investigación científica de la psicología del hombre surgen: a nivel teórico, múltiples marcos referenciales que intentan dar cuenta de concepción del hombre y de su mente. Y a nivel practico, se intenta aplicar la psicología y sus relativamente recientes descubrimientos a las diferentes áreas del hombre. Aquí nos interesa su aplicación hacia el deporte.
Actualmente existe como rama de la psicología, la psicología del deporte; la cual tiene dentro de sus fundamentos:
1. Incrementar la motivación, el espíritu de lucha y de triunfo en los deportistas.
2. Movilizar los obstáculos psíquicos que impidan la mencionada motivación o el alcanzar el triunfo. Un ejemplo de esto lo tenemos en el análisis que Sigmund Freud hace de los caracteres de las personas que fracasan cuando triunfan. Clínicamente lo conocemos en el caso de deportistas de alto rendimiento, que habiendo alcanzado todas las metas para conformarlo como un excelente deportista y competidor, decae en su rendimiento sin lograr el triunfo.
3. Favorecer la superación física y mental del deportista para incrementar su rendimiento cuali-cuantitativo.
Valga una crítica al respecto, del punto de vista de la psicología del deporte. Su interés es el triunfo, el formar ganadores o como se diría en el ámbito deportivo, hacer “mentes ganadoras”. Por otra parte, de la sentencia “mente sana en cuerpo sano”, parece siempre tener preponderancia el cuerpo o la preparación física, sobre la mental; como si el cuerpo sano fuera sin más determinante y condicionante de la mente sana. Por ello quizás se ha enfatizado más en el desarrollo físico. Ahora bien, debemos considerar que en dicha sentencia el sentido de la misma es reciproco. El karate do lo favorece y así lo debemos concebir.
Si ya mencionamos la reciprocidad entre lo físico (el cuerpo) y lo psíquico (la mente) debemos referirnos un poco más a este aspecto desde la frase celebre de nuestro epígrafe. Socrates decía “conócete a ti mismo” y ahora debe preguntarse ¿qué relación tiene ese conocerse a sí mismo con la practica del deporte y específicamente del karate do? La respuesta la encontraremos en el desarrollo de la presente tesina.
La elaboración de la tesina Karate do y psicología representa la confluencia de diversas vías de una vida, la practica deportiva, la practica del karate do, el desarrollo de una disciplina como la psicología; pero también una filosofía del ser y de la vida.
De esta manera, el presente obra incluye en la exposición algunos conceptos básicos relacionados con la psicología, la filosofía Zen, el código Bushido y los conceptos básicos y los ejercicios transmitidos a los practicantes del karate do en la escuela Shei Shin Kan Karate Do. Lo cual incluye desde el alumno cinta blanca hasta el sheito (primer
kyu) cinta marrón; este último sustentante a primer Dan cinta negra.

LA PSICOLOGIA

Referirnos, desde un marco conceptual de la psicología, a la frase “conócete a ti mismo” implica abordar la concepción del hombre, la cual es necesaria en el desarrollo de una postura psicológica determinada. De acuerdo a dichas corrientes de pensamiento dentro de la psicología, encontraríamos la reafirmación o el cuestionamiento de tal sentencia e incluso la invalidación de la misma. Así por ejemplo, la psicología pavloviana o skinneriana negaría la posibilidad de conocerse a sí mismo; ya que la misma enfatiza en la reflexología y niega la posibilidad de la conciencia. Aunque dichas corrientes ha desarrollado modelos de trabajo aplicables a la explicación y ejercicio de la motivación. De esta manera la aplicación del reforzamiento positivo incrementa el rendimiento del ser humano. Algunos teóricos, basados en dicha concepción afirman que los reforzadores sociales positivos como el prestigio, la posibilidad de estatus ante los demás o por mejoras económicas, etc. Favorecen el incremento del rendimiento. Si lo enfocáramos desde el karate, debería decirse que es posible que ello incida en los karatedocas, sobretodo en aquellos inclinados a las competencias. ¿Pero para la generalidad de los practicante de esta arte marcial? No hay que olvidar que en Shei Shin Kan Karate Do existen quienes tienen interés por la participación en los torneos, pero también los hay quienes lo practican sin interés en estos; privilegiando más la practica, el perfeccionamiento de la técnica e incluso el apego a uno de los fundamentos del karate: “el karate es para defensa”, independientemente de la capacidad que se adquiere para golpear o atacar. Desde otra perspectiva, inclinándonos hacia el condicionamiento clásico Iván Pavlov demostró que en los animales y en el ser humano se podían establecer respuestas reflejas. Esto, enfocado desde el karate, se diría que la practica constante genera precisamente el condicionamiento y la respuesta rápida de defensa y ataque. Esto generado sobretodo desde los estímulos visuales. Sin embargo, ello equivaldría a las respuestas automáticas o reflejas en el karate, lo cual se puede lograr pero que no es el fundamento o lo esencial de esta arte marcial. De ser así, se estaría en total contradicción con la práctica de una filosofía de vida. Además, esto también estaría en contradicción con la postura de que el “buen” karateca en combate hace su combate y provoca que el adversario combata con él y no contra él. ¿de que valdría entonces el aprender una estrategia de defensa y ataque? ¿acaso el karatedoca sería una
maquina generadora de golpes? Algo así como un makiwara, una pera, un costal, el cual tuvo una movilidad por que tuvo un estímulo que lo genero. Tampoco la respuesta rápida o “semiautomática” de defensa es similar al reflejo rotular o patelar; por eso decimos “semiautomatica” o no automatica. Esto es debido a que la respuesta de defensa y ataque tiene variaciones en fuerza, dirección e intencionalidad.
Si la practica del karate no es la creación de un autómata ¿cómo conciliarla con otra postura psicológica? En nuestro auxilio acude la teoría psicoanalítica que tiene mayor aplicabilidad hacia la psique humana y la cual también podemos relacionarla con diversos aspectos de las artes marciales, el karate do. Bástenos de momento indicar la amplitud que se alcanza entre esta disciplina y la psicología al retomar él termino “Do” cuyo significado es “camino” . el psicoanálisis concibe al ser humano en su desarrollo psíquico como un río, un “camino”, que dependiendo de los obstáculos que impidan su libre paso conforma múltiples y variados ramales. Ramales que son desviaciones que tienen como fin proseguir el camino y que representan el salvamento de obstáculos. Dentro de la psicología clínica muchos de esos brazos adyacentes conformados representan la enfermedad mental y la sintomatología; la cual repercute en la salud y la infelicidad del hombre. Sin embargo, uno de ellos es fundamental, ya que representa la sublimación; que es la canalización de la energía psíquica, representada por el río, hacia aspectos positivos y altamente valorados por nuestra sociedad. Mecanismo que representa la superación del estatus filogenético del hombre y responsable del desarrollo cultural y de la civilización. En otras palabras, aproximadamente, Sigmund Freud menciona: “cuando el hombre domina sus pasiones y pulsiones progresa en el desarrollo de su estructura psíquica y desde el salvajismo social hasta la cultura y civilización actual. Desde esta perspectiva es importante recordar una partícula japonesa más que es “Jo”, cuyo significado es “lugar”. Uniendo ambos términos, “Dojo” sabemos que el lugar en el cual se practica el karate es el “templo o el lugar donde se busca el camino de la superación” superación de sí mismo, no solo de la fortaleza física sí también espiritualmente. Desde esta perspectiva tenemos un punto de concordancia con la filosofía Zen y el código Bushido. Al igual, el karate do no lleva a la superación personal al favorecer el dominio y el control de las pasiones o emociones tanto del karatedoca y tanto en la practica como en el kumite (combate). Alguna vez, uno de los sensei
decía que no se debe combatir enojado y que nuestra mente debe estar clara. De lo contrario, es posible que antes de empezar el kumite este ya este perdido. Esto es válido para la ira, pero también para el temor o miedo o cualquier otra emoción. Por otra parte, al fomentarse en la filosofía del karate la defensa antes que el ataque, ello nos plantea la búsqueda del control sobre sí mismo; y a la vez la canalización de la energía humana, el “Ki”. Por ello en la practica constante y en las enseñanzas de cada sensei a sus alumnos les inculca el espíritu de superación. Ejemplo de ello es el comentario de una cinta negra quien decía: “Cuándo me introduje en la practica del karate, siendo un niño, esto me gusto tanto que en verdad me esforzaba ¿Sin embargo, no se que paso en mi adolescencia? En esa época mi vida era un caos e incluso pense en abandonar el karate. Más los consejos de mi sensei y él haber continuado en el karate me ayudaron a superar esa etapa y a persistir en mis metas. Creo que no haber abandonado el karate fue el motivo principal de lo que soy ahora y de lo que ahora hago”.
Sigmund Freud, en sus “Tres ensayos de teoría sexual” refiere que el deporte es fundamental como auxiliar pedagógico en la educación de los niños y los jóvenes. Y así debemos considerar el karate, en una de sus facetas, como un deporte. ¿De que manera funge el karate y el deporte como auxiliar pedagógico? Ya lo afirmaba con anterioridad, por los preceptos que fomenta en los alumnos. Sin embargo, también debemos enfocarlos desde la misma practica; esto es posible dado que la ejercitación y la técnica implican la consigna de ciertos movimientos o la aplicación de ciertas reglas. La ejercitación de las mismas implica dos aspectos de importancia para la psicología: el seguimiento de instrucciones y la aceptación de limites. La primera es de gran importancia, ya que incluso capacita para el ejercicio posterior de la enseñanza, al llegar al grado de primer Dan (cinta negra). No hay que olvidar viejos preceptos de la psicología con respecto al liderazgo, en donde se afirma que para saber ordenar hay que saber obedecer. La segunda involucra el contemplar las capacidades, habilidades, potencialidades y limitaciones de cada ser humano. Esto representa entonces la introducción del sentido de realidad, indispensable para la vida del ser humano. Es importante entender ese sentido de realidad no como un obstáculo sino como un conocimiento que permite el desarrollo. La importancia de la presencia y la introducción de los limites, incluso deben considerarse como factores protectores, a nivel de lo psíquico. Un ejemplo de la
importancia de su carencia es frecuente encontrarla entre los farmacodependientes. En ellos la ausencia de limites implica la imposibilidad de respetarlos y se le considera como un factor importante en el desarrollo de la farmacodependencia. Desde una perspectiva diferente, debe considerarse que incorporar un limite implica la incorporación de y respeto de las normas y preceptos sociales y familiares. Ahora bien, el sentido de realidad, entendido como el principio de realidad se encuentra estrechamente relacionado con el principio de placer; pero él primero es regulador del segundo. Ello conlleva que el ejercicio del karate puede ser una fuente de placer; lo cual es indudable ya que de otra manera no se le practicaría. Al respecto no hay que olvidar que desde el punto de vista psíquico, se ha observado que el logro de metas o el dominio de habilidades son una fuente importante de placer, Ejemplo de ello es manifiesto en el niño, de aproximadamente un año, quien al adquirir la capacidad de caminar y desplazarse obtiene placer de dicha actividad, según René Spit, en su texto “El primer año de vida del niño”. Un ejemplo practico en el aprendizaje del karate puede ser el siguiente: después de determinado tiempo de practica del karate, cuando hay un mayor dominio de la técnica o mayor facilidad y rapidez para coordinar los movimientos o aprender nuevos movimientos, el practicante de karate observa con satisfacción y placer esa facilidad, sobre todo cuando recuerda sus inicios o se compara con los alumnos principiantes. ¿qué efecto puede tener esto sobre un individuo? Indudablemente el incremento de la autoestima y con ello la confianza en sí mismo.
Uno de los mecanismos de defensa importantes para el ser humano es la introyección. A través de él, el psicoanálisis visualiza la incorporación del mundo al psiquismo humano. Su importancia es tal que desde el nacimiento esta en acción e influye en la estructuración del yo. Se ha considerado que al nacer el hombre, este no posee una diferenciación entre él yo y el no-yo. Solo paulatinamente y a través de los órganos de los sentidos lo incorpora. Otros autores de la psicología conciben al niño, analógicamente, como una esponja que todo absorbe. Dicho mecanismo es importante más adelante, cuando se da la estructuración del superyo, el yo ideal y el ideal del yo. El primero nos refiere, de manera sintética, a l estructuración de una instancia psíquica en la cual se encuentran contenidos los preceptos morales y culturales que norman el comportamiento del hombre. Una de sus funciones corresponden a los frenos conductuales. El segundo, podría interpretarse como aquello a lo que se aspira a alcanzar y que
conforma los modelos a seguir y a alcanzar. El último representa las aspiraciones que ha integrado el hombre. Ahora bien, todo este proceso de estructuración tiene como fundamento las “imagos “ paternas, según lo refiere Sigmund Freud en diferentes textos. “Imagos “ paternas introyectadas y que representan a los padres, los hermanos o aquellas personas en quienes se ha delegado autoridad para educar al niño, los educadores de todo tipo. En este sentido es importante lo que hace y el lugar que ocupa el sensei en la practica del karate. Este aspecto introduce como cuestión relevante, la responsabilidad de cada sensei en la practica de esta arte marcial. Asumir que él puede ser modelo, ideal, guía y educador no solo de una técnica sino de una filosofía, lo cual representa un gran compromiso.
Un punto de vista diferente desde el cual puede enfocarse la psicología es desde el área del aprendizaje y el ejercicio de funciones. Por ejemplo, la exigencia en la concentración de la práctica implica no solo enfocar las actividades a realizar, sino efectivamente el favorecer el incremento de dicha capacidad, al igual que la atención. El incremento de la capacidad de soportar el dolor es otra de las facultades que se ven estimuladas al incrementar la resistencia física y psíquica. Cuando nos referimos al kumite, este implica la elaboración de una estrategia de defensa y ataque o bien el comprender la estrategia del contrincante. Con ello se favorece el ejercicio de funciones como son la anticipación y la planeación; ambas involucradas en la capacidad de organización del hombre.

EL ZEN Y LA PSICOLOGIA

El karate do esta íntimamente relacionado con la filosofía o sistema religioso denominado Zen. Filosofía religiosa derivada del Budismo, que adquiere tal denominación al incorporarse a la vida de los japoneses.
Tanto en Budismo como El Ch’an y el Zen tienen como principal fundamento el lograr la trascendencia del hombre mismo. Su filosofía es la búsqueda constante por alcanzar el estado de iluminación que alcanzara Buda. Para ello realiza una practica constante de la meditación y reflexión sobre sí mismo, buscando el pleno conocimiento de sí mismo. El análisis de esa búsqueda a la luz de los conceptos de la psicología, reproducen la vieja sentencia de Sócrates: “conócete a ti mismo”. Dicha trascendencia es fundamental, en especial en el sentido espiritual, yendo más allá de la corporeidad y la naturaleza física del hombre; aspecto que lo encadena al mundo físico y lo aleja del mundo espiritual. La pregunta obligada es, ¿para qué buscar tal estado de espiritualidad, de iluminación o de “Nirvana” ? Robert Linssen, en su texto ”El Zen” nos acerca a una posible respuesta. Él afirma que tal búsqueda pretende la trascendencia de las limitaciones a que el hombre esta sujeto. Avanzar de su naturaleza física a su naturaleza espiritual a través del conocimiento físico, psíquico y social de sí mismo, a fin de lograr un crecimiento espiritual personal.
Robert Linssen dice que el hombre es responsable de sus propias emociones y miserias personales, pero afirma que el conocimiento de si mismo permite su dominio y control. ¿Por qué es tan importante dicha trascendencia?, tal como lo refiere Sigmund Freud, en su texto “Introducción del Narcisismo”, con respecto a la cita de Wilhelm Busch en uno de sus poemas, que dice: “…En la estrecha cavidad de su muela se recluye el alma toda…”
Esto significa que ante el dominio del mundo físico sobre el hombre se da la resignación y una limitación de la vida espiritual o psíquica del hombre. Imponiendo a estas múltiples limitaciones en su desenvolvimiento o desarrollo. Por eso el autor afirmaba que ante el dolor de una muela, en la cavidad de esta se recluye el alma toda. Sigmund Freud agrega diciendo que todo interés por el mundo externo se pierde y solo importa aquello que se relaciona con el sufrimiento imperante. Desde la práctica del karate do existen múltiples ejemplos. Así, cuando un alumno de esta práctica afirmaba y estaba convencido
de no poder superar sus limitaciones ante determinados ejercicios, efectivamente le era imposible cualquier superación o intento de superación. Desde la psicología contemporánea se dice, que entonces se quiere pero no se puede. En diversas situaciones observamos la capacidad de superación del ser humano. Por ejemplo son conocidas las proezas que algunas personas han realizado en situaciones de peligro de sobrevivencia e incluso de fuerza muscular; como el caso de una madre que mueve un gran peso ante el peligro de que su hijo fallezca por aplastamiento. De una manera más modesta esto se observa en la práctica del karate do; ejemplo de ello se dio en una clase, en donde un niño al realizar un gran esfuerzo en un ejercicio afirmaba no poder más y pedía interrumpir el ejercicio. Sin embargo, el sensei presente lo estimulo y motivo a continuar, diciéndolo que terminara el ejercicio y que se esforzara aún más; que recordara que cuando toda persona afirma no poder más, el karateca puede ir un paso más allá, él trasciende ese limite autoimpuesto por los demás. Resultado, el alumno concluyo el ejercicio. Es en este sentido que la filosofía Zen, la psicología y el karate tienen un punto de unión , que es la superación y la trascendencia de sí mismo.
Otro aspecto del Zen que hay que enfatizar se relaciona con el conocimiento de sí mismo. En el caso de esta filosofía, se propicia la superación de los limites del hombre a través del propio conocimiento. Y la psicología moderna busca ese mismo autoconocimiento a fin de trascender sus autolimitaciones. La filosofía Zen dice: la trascendencia de los yo ilusorios o de sus espejismos. Tanto en el Zen como en la psicología, el alcanzar el autoconocimiento equivale a la superación de sí mismo. De esta manera y retomando a Socrátes, su frase de “conócete a ti mismo” implica no solo el conocimiento sino el lograr la superación o la expansión de la propia conciencia. Esto incrementa la voluntad del hombre y el dominio de las propias pasiones, con lo cual podemos avanzar un paso más de la imperfección a la perfección.
Aún cuando se dice que el Zen debe tener poca relación con el karate, esto debemos actualmente considerarlo como un error. Dicho concepto se deriva tal vez del planteamiento de que el Zen favorece la no violencia y el karate esta considerado como una práctica de combate y violencia. Sin embargo, actualmente se puede afirmar como antaño, que la práctica del karate tiene como primer adversario a sí mismo. El lograr un grado de dominio de las técnicas de defensa y ataque, así como el poseer el conocimiento del efecto de las defensas y el ataque crea una mayor responsabilidad en el karateca con
respecto a sus conocimientos. No es el mejor karateca quien mejor golpea o quien tiene la técnica más depurada, sino quien domina la técnica y a sí mismo. Esto es posiblemente uno de los fundamentos por los cuales el cinturón negro, primer Dan, no debe ser otorgado a cualquier alumno, sino a quien domina la técnica y a sí mismo. Quien alcanza un alto grado de deber y responsabilidad por los conocimientos adquiridos. Decía alguien, es fácil golpear, defenderse y lastimar al oponente, pero es mucho más difícil tener control de sí mismo con todos los conocimientos que el karate proporciona. Es por eso, que uno de los mayores retos en el karate no es la superación física sino la superación espiritual a fin de hacer de el hombre una persona más honorable, mejor, responsable y madura.
Al expandir la conciencia, trascenderse a sí mismo, alcanzar la madurez y la responsabilidad, el hombre adquiere la capacidad de decidir su destino. Haciéndose de esta manera el hombre el constructor de su propia vida. De igual manera la psicología, al hacer consciente lo inconsciente busca dar cause a las fuerzas psíquicas del hombre, hacia la superación de sus pulsiones y la sublimación de las mismas en beneficio propio y de quienes nos rodean. Con ello se puede alcanzar la felicidad y el bienestar personal.

CODIGO BUSHIDO Y PSICOLOGIA

En esta sección reconsideraremos uno de los aspectos fundamentales del karate do, el cual debe estar presente y ser ejercido por el karatedoca; nos referimos al código Bushido. Su seguimiento no debe ser opcional, sino que se le debe establecer y adherise a el desde que el practicante del karate se inicia en el mismo; es decir, desde que “pisa un dojo” o desde el momento en que se ciñe una cinta blanca o adopta el uso del karategui. Por otra parte, dicho código Bushido debe estar presente en la totalidad de la vida del karatedoca. No es como una vestimenta que se puede poner y quitar o de la cual se deba prescindir en determinadas situaciones o que este al libre albedríos del arte marcialista. Desde esta perspectiva de la constancia y permanencia encontramos una relación más entre la psicología y el karate do. Ambas características son fundamentales en la vida psíquica de todo ser humano y su presencia definen e influyen la totalidad de su vida. Es por ello que el énfasis que la práctica y la filosofía del karate tienen sobre el código Bushido es fundamental. Con ello contribuye en el caso de los niños y los jóvenes a la integración, conformación y consolidación de su carácter y personalidad. Dados los preceptos contenidos en el código Bushido, de momento puede decirse que favorece el conocimiento de la personalidad positiva o, desde el campo de la psicología clínica, saludable y madura. Tales preceptos pueden considerarse como un sistema de normas morales y sociales que determinan, guían, orientan y encausan al ser humano. De hecho, en nuestra actual sociedad, al igual que en la antigüedad, el sistema de valores morales y sociales son inherentes a la cultura y la civilización. Misma que según el psicoanálisis, de acuerdo a Sigmund Freud, se encuentran introyectadas en la psique y están contenidas en el superyo, el ideal del yo y él yo ideal. De esta manera, debemos tener conciencia de que la presencia del código Bushido en la práctica misma del karate, en el dojo y en la filosofía de esta arte marcial, permite su implementación y reforzamiento en los niños y en los jóvenes. Es por ello, que al menos en parte es válido el dicho de que el karate es formador del carácter de quien lo practica.
Ahora bien, no solo son niños y jóvenes quienes practican nuestra arte marcial, sino también los adultos jóvenes y personas de mayor edad. Reflexiones sobre el código Bushido en ellos, al menos en los adultos jóvenes puede pensarse que esto ya tienen un sistema
de valores conformados y que la presencia del código no lo puede modificar. Sin embargo, esto negaría la capacidad de cambio propia e inherente al ser humano; su mismo desarrollo y evolución no permite tal cuestionamiento. Es por ello que se debe considerar que el código Bushido presenta determinados preceptos que al ser incorporados en el adulto joven implican la modificación de su sistema de valores. Nadie que practique el karate do y niegue el código Bushido, desde nuestro punto de vista puede considerarse un “buen karateca”. A este le faltaría un aspecto importante en su formación como karateca, aún cuando fuese un excelente técnico y domine las katas y la técnica del karate do.
En especial, en el adulto, en quien ya tiene una forma de ser y difícilmente puede cambiar su carácter o personalidad, así nos lo hace saber la psicología, el código Bushido es importante. Si esta persona lo sigue, puede decirse que este ya posee una característica importante en él, que es el respeto. Cualidad que con el ejercicio del código Bushido indudablemente se reafirmara. Considerando las características de los grupos de practicantes del karate do, el respeto es fundamental. La heterogeneidad de los mismo implica la consideración si un adulto practica con un niño, un joven o un adulto joven y a la inversa. La importancia del respeto adquiere tal relevancia que incluso por eso el Benemérito de las Américas Don Benito Juárez dijo: “Entre los hombres como entre las Naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”. La trascendencia de esta cualidad radica en su efecto sobre la sociedad, pero también sobre cada uno de los hombres, sean estos de diversas edades o sexo. Por otra parte, si se careciera del mismo, probablemente los mismos interesados en el karate do y los familiares de estos no posibilitarían su practica. La falta de respeto engendraría rechazo hacia el sensei, los compañeros de practica y el mismo karate.
Valga mencionar al introducirnos propiamente al código Bushido, la consideración que hace Robert Linssen, en su texto “El Zen”, que dice: “…El dictador militar Yoromito y sus discípulos se adueñaron del poder (en Japón) en el siglo XIII. Se inspiraron en ciertos principios del Zen y dieron nacimiento a una escuela muy particular el Bushido. Se trata de una aplicación bastante paradójica y discutible del Zen en las <artes> de la guerra. De hecho el Bushido y la pretendida aplicación de los principios del Zen a las artes marciales no tiene nada que ver con el espíritu de las enseñanzas originales de Ch’an y del Zen. Indudablemente, se trata de una desviación que debería considerarse
como una traición que al mismo tiempo es muy sutil y muy hábil. Contrariamente a lo escrito por Th. Von Boaren, el Zen no predica la resignación ni la aceptación del orden establecido. Por otra parte es la esencia misma de la no violencia…” Si bien el código Bushido parece estar revestido de aspectos negativos e incluso matizados de crueldad, debemos considerar que el código Bushido ha evolucionado. Es factible que así se iniciara, después de todo convenía a los grandes señores feudales del Japón. Ese código les fue de tanta utilidad, que con el se aseguraban la lealtad y el apoyo incondicional de sus soldados y de los samurai. No debe olvidarse que la obediencia incluía hasta ofrecer la vida por su señor, no solo en la guerra sino también para a través de él pagar sus deudas de honor o las faltas cometidas por este. Si se considera al código Bushido en relación al karate do deben realizarse ciertas precisiones. En la cita del autor dice que la filosofía del Ch’an y del Zen tienen en su esencia la no violencia, lo cual el autor afirma no esta presente en las artes marciales. Sin embargo, tal apreciación es un error, ya que al menos el karate do es más que eso. Es el aprender y aprehender una técnica y una filosofía de la vida. Busca el dominio del arte de la defensa y del ataque pero no para ejercer la violencia. Pretende contar con el conocimiento un sistema de defensa y ataque para no resignarse a ser objeto de la violencia de los otros. Es por ello que en el karate do se predica “aprender a defenderse para no tener que pelear”, así, se dice: “tal vez, al observar el oponente, que se posee un sistema de defensa eficiente y eficaz para evitar los golpes, el adversario se desaliente de continuar atacando o bien, al experimentar la fuerza de la defensa, que incluso puede provocar dolor en el contrincante, sea el motivo para no continuar la agresión”. Desde este punto de vista, es una forma diferente de ejercer y estar a favor de la no violencia. Por otra parte, una de las premisas del karate do también dice, nuestra arte marcial es primero para la defensa, pero la misma defensa es ya un ataque. Así, reflexionado sobre esta postura del karate do es importante observar que esto conforma una filosofía y estilo de vida; el cual esta contenido en los preceptos del código Bushido. Esto es importante nuevamente para la psicología al conformar parte del sistema de normas y valores morales y sociales que orientan las fuerzas del ser humano. Cuando esto ocurre, cuando se inicia y persiste en la practica del karate, puede afirmarse que se proporciona algo que puede ser incorporado en la psique humana; el cual es indudable es incorporado a ese superyó, que censura y de manera
amplia determina la conducta de un individuo entre el placer y el deber, e incluso entre lo bueno y lo malo. Particularmente, en nuestra escuela, no se enseña el karate do para abusar de los demás o para estimular la agresividad sin control; lo cual no contradice el favorecer y permitir que el karateca tenga los elementos suficientes y bastos para competir en torneos y tener gran éxito en los mismos. El karate enseña el control sobre sí mismo, en donde el primer oponente a vencer es uno mismo con todos sus complejos, debilidades y virtudes. Para concluir, acerca de la no violencia, hay que recordar que Daruma Taichi aprendió de los animales sus técnicas de defensa y ataque, lo cual enseño a los monjes Shaolin; y con lo cual podrían preservar su vida ante los peligros que enfrentaban, pero al incorporarlo a la meditación y la practica del budismo, los ejercicios, el dominio de la técnica posibilitaron ir más allá de la defensa y el ataque; Permitió favorecer el ejercicio, el control, la relajación y la reflexión. Ejemplo de esto, es favorecido por la práctica del Tai Chi, pero no ajeno a nuestra escuela.
Toca ahora referirnos específicamente a los conceptos contenidos en el código Bushido y la filosofía del caballero budoka, que son: el honor, la lealtad (a uno mismo, a la familia, a la patria y a la escuela, aunque no necesariamente en ese orden), la fidelidad, el valor, el respeto a los superiores (al sensei, a los mayores, a la naturaleza, a todo ser vivo, etc.), la justicia, la cortesía, la tolerancia y la constancia. El esfuerzo que se requiere para adoptarlo, mantenerlo y practicarlo, nos refiere desde el punto de vista de la psicología a las habilidades, las normas, los valores, las aptitudes y las actitudes de todo ser humano. Los cuales desde la filosofía humanística son altamente valorados por nuestra sociedad. Su ejercicio refiere a la existencia de una personalidad con carácter y madurez personal. Situación que representa y lleva al hombre a tener un sentido de realidad y de adaptación social. El karate hace así de los hombres, personas confiables en quienes se puede confiar. La psicología clínica, educativa y social ha dado importancia a los valores y normas del se humano. Y los contenidos del código Bushido y la filosofía del caballero budoka son altamente estimados y requeridos en nuestra sociedad.

PSICOLOGIA Y PRACTICA DEL KARATE DO

Corresponde ahora observar la aplicación practica de la psicología en relación a la práctica y ejercicio de nuestra arte marcial.
Existe en el karate do diferentes puntos de concentración. Ejemplo de ellos son: los nudillos, correspondientes a los dedos índice y medio con los cuales se golpea en los tzuky y uraken; la “bola” del pie en mae geri, nami geri y mawashi geri; el codo; el talón del pie en kakato geri y ushiro geri; el borde exterior del pie (filo o canto del pie) en yoko geri y shoto geri; el canto interior y exterior de la mano en haito y shuto respectivamente; la rodilla; la muñeca de la mano en koken; y el talón de la mano en shotei. Todos ellos son puntos de concentración de la fuerza al golpear con manos, codos, rodillas y pies. Son puntos en los cuales desde la practica se afirma se concentra la energía y desde la psicología diriase se concentra la atención. Tal concentración de la atención es importante desde la psicología, ya que nuestra capacidad de conciencia es limitada. Según la semiología psiquiátrica de Beta y de Hendir Ey, solo cinco seis estímulos pueden ser captados por la conciencia, aunque nuestro comportamiento involucra a muchos más estímulos, los cuales tienen un efecto de excitación en los órganos de los sentidos pero no de manera consciente.
Dos aspectos fundamentales en el karate do como puntos de concentración se refieren a kia, la respiración y los puntos de equilibrio. El primero nos refiere a la concentración de la fuerza y a la ejecución adecuada de la respiración; esta última permite una mayor resistencia o una rápida recuperación durante los ejercicios o el combate. En cuanto a los puntos de equilibrio estos son fundamentales para evitar las caídas ante la ejecución de los golpes o movimientos con manos o pies; pero a la vez son de importancia para la realización de las posiciones e imprimir con su adecuada ejecución la fuerza a los golpes. Otra parte importante de los puntos de equilibrio se relacionan con la defensa y el ataque, ya que ello permite la realización de secuencias de golpes o la combinación rápida de ataque y defensa. Como se sabe, el Kia al ejecutarse se combina con la emisión de un grito al liberar la energía. Desde esta perspectiva puede observarse la importancia de la práctica de la concentración en el karate do, específicamente en los kumites. El grito favorece la desconcentración y el descontrol del adversario con lo cual se puede haber perdido el kumite. La concentración de la mirada en los ojos del
adversario, a la vez permite anticipar sus movimientos y en combate se dice: “en coacciones desde la mirada y la observación del adversario es el combate esta ganado o perdido"”
Otro aspecto donde se involucra la concentración, necesaria para focalizar un punto es la precisión para realizar los ataque y las defensa. Ejemplo la agudización de los sentidos, la velocidad de respuesta del cerebro y la visión periférica. La última se refiere al rango de visión lateral que tiene el ser humano. Su visión binocular es básicamente hacia el frente. Considerar dicha visión es fundamental ya que ello permite la percepción de un mayor número de estímulos. Estímulos que por la capacidad limitada de la conciencia para contenerlos no son concientizados, pero no por ello no son efectivos. Sigmund Freud aplica esto a las premoniciones oníricas cumplidas. Dicho autor concluye que el ser humano percibe mayores cantidades de estímulos desde el inconsciente y que son efectivos en las producciones psíquicas. Con respecto a las premoniciones oníricas cumplidas Sigmund Freud afirma que la velocidad de respuesta y de procesamiento del cerebro permite dar cuenta y sentido de dichos estímulos. La velocidad de respuesta, en este caso, para ejecutar un golpe de defensa o de ataque, se relaciona también con la automatización o semiautomatización alcanzada por la práctica del karate, mediante la continua y constante repetición de la técnica. Ahora bien, esto no explicaría del todo la certeza de la reacción del karateca cuando tiene cubiertos los ojos. ¿Cómo es posible ello? Existen dos posibles explicaciones si consideramos a la psicología. Una corresponde a la agudización de los sentidos ante la carencia de uno de ellos. Esto es más claro cuando observamos a los invidentes, los cuales suplen en gran medida la ausencia de la vista por la sensibilidad táctil y auditiva. Esta agudización sensorial es aquello que se incrementa y se favorecen la práctica del mushin. La segunda se relaciona con la práctica de la técnica. La defensa y el ataque siguen con frecuencia una lógica de causa y efecto o acción o reacción. Desde este punto de vista una persona concentrada en una acción desarrollara una reacción correcta y adecuada a la misma. En una de las practicas un sensei decía: “hay que dar movilidad al cuerpo y dejar que el movimiento fluya de modo natural al movimiento corporal”. Esto implica el practicar y ejercitar la capacidad de percepción y la coordinación visomotora gruesa y fina. En múltiples casos el karate es la coordinación entre la vista y los movimientos corporales, combinados con la velocidad de reacción.
La práctica cotidiana del karate implica un aprendizaje y un conocimiento. En el sexto kyu, cinta amarilla, se enfatiza en el conocimiento de los músculos y huesos, conocimientos básicos de anatomía y fisiología del cuerpo humano. En tanto que en el segundo kyu, cinta café, se aprenden las zonas débiles, vitales y peligrosas del cuerpo humano; de ellas se enumeran 41 zonas. Y a través de los diferentes grados, para aplicar las técnicas de defensa y ataque se proporciona el conocimiento del cuerpo y de sus diferentes partes. De igual manera se enseña al practicante sus diferentes puntos concentración y de equilibrio, la ubicación de cada uno de ellos; todo esto se conoce y se reafirma en cada uno de diferentes grados.. Dichos conocimientos, desde la psicología implican el conocimiento de sí mismo (el yo físico, según los teóricos del autoconcepto). Con ello se cumple en parte el enunciado socrático de “conócete a ti mismo”. Tal autoconocimiento permite que el hombre sepa sus potencialidades y limitaciones. Conocimiento vital en el karate, a fin de que el practicante aquello de lo que puede ser capaz de realizar y de los recursos con que cuenta en su desempeño como karatedoca. Ahora bien, dicho autoconocimiento es importante no solo desde el punto de vista físico, sino a nivel de su personalidad también. Cuando el hombre se conoce a sí mismo tiene la posibilidad de superarse a sí mismo. Punto fundamental de las enseñanzas del karate en Seis Shin Kan. Así, por ejemplo, tenemos: 1) Una persona débil o quizás una mujer enfrentando a un hombre, al conocer su fuerza y aplicar el principio de las palancas, puede incrementar su eficacia en la defensa y el ataque, para lograr controlar a su oponente. 2) Aún en igual física, quien vence a su oponente no es quien mayor resistencia o fortaleza tenga, sino quien conoce mejor su cuerpo y el de su oponente, para golpear el el punto preciso. Es por ello que en el karate se puede decir que un combate puede acabarse con un solo golpe.
Para concluir este capitulo hay que retomar las enseñanzas en los diferentes grados de aspectos cualitativos relacionados con el mismo. Ejemplo de ello es el desarrollo de la historia del karate do y la introducción de conceptos como son el significado de la escuela, del escudo, de la importancia del karategui, el código bushido, el saludo, la diferencia de los grados y las tradiciones dentro de la práctica del karate. Todo esto permite la integración de un estilo de vida, con sus normas y valores propios y acordes a una sociedad en la cual vivimos. Esto favorece la enseñanza de conceptos como son: el honor, la disciplina, la constancia, la perseverancia, la superación, la humildad,
la autenticidad, el compañerismo, el respeto a los débiles, los seres vivos, a uno mismo, los mayores, etc., el compartir, la defensa de si mismo y los principios de convivencia y fraternidad humana y social.

EJERCICIOS PARA UNA CLASE DE ALUMNOS HETEROGENEOS

Saludo inicial
PROFESOR
ALUMNO
DOZO (Orden de alineación de alumnos frente a los profesores)
(Alumnos alineados por grado decreciente de derecha a izquierda)
(media vuelta de los profesores colocándose en zeiza y de espalda a los alumnos)
KIOSQUE (Orden de atención en posición mushubi dachi)
(Posición zeiza)
ZEIZA
SHOME NI REI (Saludo a la divinidad por aproximadamente 15 segundos)
(Posición zeiza)
(Posición zeiza)
(Dando media vuelta los profesores permanecen en zeiza)
(Se mantiene posición zeiza)
MOKTU (orden de cerrar los ojos y relajarse)
(Ojos cerrados y en relajación)
YAMA (Orden de abrir los ojos)
(Orden de abrir los ojos)
(Profesores responden saludo de los alumnos)
SENSEI NI REI o REINSHI NI REI (Saludo a los profesores)
(Profesores se ponen de pie)
KIRITSU (Alumnos se ponen de pie)
ASHIMEMAS (Orden de iniciar la clase)
ONEGAISMAS (Respuesta de los alumnos para iniciar la clase)
EJERCICIOS DE CALENTAMIENTO
SHINKOKYU (Respiración doble y sonora)
Movimientos de brazos
Giro de brazos extendidos
Giro cortos de brazos extendidos lateralmente
Giro de muñecas
Con palmas extendidas y abiertas
Con puños cerrados
Movimientos de muñecas “como si se volara”
Movimientos de manos (abriendo y cerrando)
Movimientos de cabeza con puños atrás
Yoko ni mukemasu (izquierda derecha)
Atama o mawashimasu (giro de izquierda a derecha y a la inversa)
Yoko ni makemasu (Izquierda derecha tocando hombro y oído)
Movimiento de arriba abajo
Movimientos circulares de hombros
Koshio mawashimasu (Movimientos circulares de cintura)
Hiza o mawashimasu (Movimientos circulares de rodillas)
Yamaga Mae
EJERCICIOS DE ELASTICIDAD
Abriendo compás de las piernas
Abdominal con codos al piso
Abdominal tocando con los dedos ambos pies
Abdominal en tres tiempos
Muelleando sobre una pierna doblada y la contraria estirada y a la inversa
Girando 90 grados muelleando sobre una pierna doblada y la contraria estirada y a la inversa
EJERCICIOS DE FUERZA Y COORDINACION
Siko dachi Sonkyo ( a la inversa)
Movimientos de piernas mientras se esta acostado boca arriba y apoyado en los codos
Nami geri desde siko dachi (izquierda, derecha y alternando)
Furi age (avanzando un paso)
Furi nage (avanzando un paso)
Combinación de ejercicios (desde la posición de musubi dachi a sonkyo, posición de lagartijas y kiritsu
MOVIMIENTOS BASICOS
En posición Sonkyo
Zuky
Gedan Barai
Shudan uchi uke
Shudan soto uke
Jodan age uke
En posición musubi dachi a sonkyo (al levantarse)
Mae geri
Nami geri
Mawashi geri
PARTE FUERTE DE LA CLASE
Caminando en zenkutzu dachi gedan barai uke, shudan uchi uke, shudan soto uke y jodan age uke
Caminando en siko dachi gedan barai uke, shudan uchi uke, shudan soto uke y jodan age uke
Caminando en zenkutzu dachi alternando pierna al frente y atrás mae geri, nami geri
Yoko tobi geri
Mae tobi geri
IPON KUMITE BASICO (Por parejas)
Defensa jodan age uke con yako zuki
Defensa shudan soto uke con yako zuki
Mae geri con ni jon zuki
YAKUTZU KUMITE
Kakato geri circular ante ataque con oi zuky (en parejas)
Caminando en zenkutzu dachi defensas gedan barai uke, shudan uchi uke, shudan soto uke y jodan age uke ante zuki a jodan, shudan y gedan
KATAS
HAITE (50)
SHINKOKYU
saludo FINAL
PROFESOR
ALUMNO
DOZO (Orden de alineación de alumnos frente a los profesores)
(Alumnos alineados por grado decreciente de derecha a izquierda)
(media vuelta de los profesores colocandose en zeiza y de
KIOSQUE (Orden de atención en posición mushubi dachi)
espalda a los alumnos)
(Posición zeiza)
ZEIZA
SHOME NI REI (Saludo a la divinidad por aproximadamente 15 segundos)
(Posición zeiza)
(Posición zeiza)
(Dando media vuelta los profesores permanecen en zeiza)
(Se mantiene posición zeiza)
MOKTU (orden de cerrar los ojos y relajarse)
(Ojos cerrados y en relajación)
YAMA (Orden de abrir los ojos)
(Orden de abrir los ojos)
(Profesores responden saludo de los alumnos)
SENSEI NI REI o REINSHI NI REI (Saludo a los profesores)
(Profesores se ponen de pie)
KIRITSU (Alumnos se ponen de pie)
ARIGATO GADAIMASTA (saludo de despedida)
ARIGATO GADAIMASTA (saludo de despedida)
DOMO ARIGATO (Gracias)
DOMO ARIGATO (Gracias)
KANSAE (fin de la clase)
DOMO ARIGATO (Gracias)

CONCLUSIÓN

Investigar y aplicar algunos de los conceptos de la psicología a la practica del karate ha permitido conjuntar dos intereses actuales.
La relación de ambas áreas es fundamental, ya que su relación es intima. Desde la filosofía, que sirve de marco referencial del karate do hasta la practica cotidiana de dicha arte marcial, este presente la psicología del ser humano. Tanto los antiguos como los modernos practicantes del karate han tenido conciencia de tal relación; motivo por el cual se insiste en la constancia en la practica y el hacer extensivos las enseñanzas del karate a la totalidad de la vida.
El karate es mucho más que una técnica de defensa y ataque o un ejercicio. El karate do debe ser una forma de vida, que permite el enfrentamiento de la misma con madurez, disciplina y éxito
No se debe olvidar, que aún los ejercicios más sencillos e insignificantes en el karate do, tienen una razón de ser, que es: el preparar al ser humano para vivir exitosamente la vida.
Por último, agregare que el karate es como un crisol en el cual se forja la mente y el cuerpo del hombre, de una manera positiva; lo cual le permite canalizar y controlar las fuerzas negativas hacia el bien del mismo karatedoca y de quienes lo rodean.

REFLEXION
Hacer una reflexión larga con respecto al karate do, después de la presente tesina, tal vez sería una redundancia. A través de ella se ha expuesto el significado que después de seis años ha adquirido el karate do en mi vida. Resumiendo tal significado debo decir. Que el karate es disciplina, fuerza, aprendizaje y vida. Es mente sana en cuerpo sano y conocimiento de uno mismo.
Fuerza para aprender y vivir. Disciplina para lograr aprender y vivir la vida. Aprendizaje de una técnica y un estilo de vida

BIBLIOGRAFÍA

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11. Freud, S. (1900) Obras completas: La interpretación de los sueños. (Jose Luis Etcheverry, trad.) Buenos Aires. Amorrortu. Vol. 5.
12. Freud, S. (1905) Obras completas: Tres ensayos de teoría sexual. (Jose Luis Etcheverry, trad.) Buenos Aires. Amorrortu. Vol. 7.
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15. Olivares, A.R. (1997). Descripción y aplicación prática e ilustrada de movimientos de katas de octavo kyu a primer kyu. México. Seishin kan karate do. Tesina (inédita).
16. Spitz, R.A. (1969). El primer año de vida del niño. (Manuel de la Escalera, trad. ) México. F.C.E. Biblioteca de psicología y psicoanálisis.

INDICE
PSICOLOGIA Y KARATE DO
INTRODUCCION
EL ZEN Y LA PSICOLOGIA
EL CODIGO BUSHIDO Y LA PSICOLOGIA
PSICOLOGIA Y PRACTICA DEL KARATE DO
EJERCICIOS PARA UNA CLASE DE ALUMNOS HETEROGENEOS
CONCLUCION
REFLEXION PERSONAL
BIBLIOGAFIA
SEISHIN KAN KARATE DO
TESINA
PSICOLOGÍA Y KARATE DO
QUE PRESENTA
ALEJANDRO FABELA ALQUICIRA
PARA OBTENER EL GRADO DE
SO DAN (CINTA NEGRA)
DICIEMBRE DE 1999