El presente documento tiene un doble propósito: cumplir con una publicación mensual más, correspondiente al mes de Diciembre de 2019. Así mismo complementar el análisis de la personalidad narcisista en los reclusorios del Estado de México. Ya publicado en este Bogger en la dirección siguiente:
https://www.blogger.com/blogger.g?blogID=6736471220288410763#editor/target=post;postID=8793446815916740250;onPublishedMenu=allposts;onClosedMenu=allposts;postNum=68;src=postname
COMPLEMENTO AL
DIAGNOSTICO DE LA PERSONALIDAD NARCISITA
Seguramente, ver a uno de los
personajes de la película “Quadrofenia”, sería posible pensar en el trastorno
de personalidad narcisista. Un sujeto delgado, rubio, corre en su motoneta, de
la época de los sesenta, por las calles o carreteras de Inglaterra,
específicamente en la ciudad de Londres. Cuando llega a los centros de música,
de la juventud londinense,, es centro de atención. Su tez y cabellos rubios lo
distinguen entre la muchedumbre. De igual manera su motoneta es reconocida por
todos y centro de atención de otros jóvenes. De color blanco y con múltiples
espejos retrovisores, se distingue entre todas las motonetas. En cuanto al
baile, también se distingue al enseñar diversos pasos coreográficos. Con ello
también llamaba la atención, logrando que los asistentes al evento musical,
hagan círculo en torno a él. Es de los
personajes más activos, cuando se desencadenan riñas callejeras. Cuando es
detenido por la policía y presentado en el estrado, luce su personalidad ante
todos, reclamando ante los jueces, policías y jóvenes detenidos, por lo cual
obtiene constantes ovaciones. Cuando hay que pagar la multa, muestra ante
todos, un fajo de billetes, pagando dicha multa para que sean liberados.
Prodigo y dispendioso en gastos económicos. Con ello un verdadero “icono” de la
exhibición y el despilfarro, ¿cómo no pensar en la presencia de un trastorno
narcisista de la personalidad?
Son
características permanentes en el sujeto, a
largo plazo y reconocibles con facilidad. Por ellos se hace sinónimo de
narcisismo el exhibicionismo. ¿Pero esto es válido en la clínica? Abordar los
diferentes cuadros clínicos implica ese narcisismo. Está presente en el
obsesivo, en el histérico, en el psicótico, incluso en los “normales”. Pero
¿cuándo lo consideramos “anormal” o patológico? El DSM-V
,
plantea que esto es, cuando ese
narcisismo provoca malestar social y funcional, claramente
significativo.
En un caso presentado
anteriormente debemos analizar ese “malestar significativo” y si está presente.
El sujeto se para frente al salón de clases de su profesora; y en cuanto ella
lo observa trata de imitar los movimientos de un chango. Pero nadie reporta que
esto provoque molestias en el sujeto. Ni siquiera se puede observar en el
relato de dicha experiencia, que haya malestar en la profesora. ¿Tal vez hasta
haya complacencia? La molestia más bien parecía de la psicóloga que reportaba
el suceso con la profesora. Esta preguntaba ¿cómo se trabajaba dicho caso? A
los cual se le respondía ¿Si ella sabía trabajar a los exhibicionistas?
Contestando que no, se le estimulaba para canalizar el caso a otro psicólogo.
¿Por qué se inquiría en el exhibicionismo? Porque eso parecía, un acto
exhibicionista. Su imitación de los changos, era el equivalente de la clásica
conducta del exhibicionista de abrir su abrigo y mostrar su cuerpo desnudo y
con una erección en su pene. En la profesora no le provocaba espanto, horror o
sorpresa, sino risa. Días antes, dicho mismo sujeto le había hecho una
propuesta indecorosa, para que ella lo aceptara como hombre. A lo que esta
respondió, no poder acceder pues era casada. El sujeto, una persona privada de
su libertad, por su participación en un hecho delictivo, ¿Qué le podía importar
si era casada o no? La negativa correcta podía haber sido, que ello no era
posible, pues era trabajadora de la institución, en la cual relaciones de
pareja entre ellos están prohibidas. Sin haber necesidad de comentar su estado
civil. Esto implicaba que había habido una relación contratranferencial por
parte de la profesora. ¿Pero en relación al narcisismo del sujeto? No se puede
suponer que esto le provocara malestar significativo alguno. Sin embargo, su
narcisismo estaba presente y activo. Y no justifica el diagnóstico de personalidad
narcisista. En los obsesivos, también está presente el narcisismo, al menos por
su “presumir” de sus conocimientos. A lo cual algunos autores
pueden señalar, como un narcisismo intelectual. En otros, los que se “presume”
es el cuerpo, como en los histéricos, fisicoculturistas, homosexuales y muchas
mujeres, quienes usan ropa provocativa (minifaldas, escotes amplios, ropa
entallada, etcétera), por lo cual se habla de un narcisismo corporal. Pero al
referirnos al psicótico, se menciona que en ellos hay una regresión profunda,
dinámicamente, hasta la fase narcisista y omnipotente. Característica que
explica el ensimismamiento de tales pacientes, donde incluso favorece su dejar
de comer, poniendo con ello en riesgo su vida. Sin embargo en ellos no existe
el “malestar significativo” en su vida, a pesar de que esta está en riesgo de
muerte. Esto tampoco ha justificado el “etiquetamiento” de personalidad
narcisista. Casos en los que evidentemente si está presente el carácter
narcisista. Caso contrario es el de Dorian Grey
,
quien a pesar de ejercer sus narcisismo si presenta ese malestar. Se siente por
poco tiempo culpable por la muerte de su amigo Basile. O se ve obligado a tapar
con una tela el cuadro en el cual se reflejaba su avejentamiento y las marcas
de su maldad, porque la visión del cuadro le resultaba intolerable. El
histérico, goza del uso del cuerpo en su, lo cual es expresión de su
narcisismo, pero no siempre le provoca “malestar significativo”. Situación
similar en los artistas de televisión, radio o cinematografía. Carácter
narcisista presente en dirigentes políticos, pero que tampoco exhiben malestar
alguno por dicha forma de ser.
Más, volviendo al análisis
inicial, hay que complementar el conocimiento del personaje rubio de la
película “Quadrofenia”. En el fin de esta, se observa a dicho sujeto trabajando
como botones de un hotel de Londres. Uniformado espera que le indiquen que
maletas cargar y no protesta cuando uno de los ricos inquilinos del hotel lo
reprende. Otro de los personajes jóvenes de la película que lo idealizaba por
sus actitudes en los centros de música y en los disturbios de la película, se
muestra decepcionado al descubrir su verdadera forma de ser. Por ello toma la
motoneta tan preciada, la roba, y le despeña en un acantilado inglés. ¿Dónde
había quedado la personalidad narcisista?